Delicias congeladas para disfrutar en casa

Las patatas son uno de los alimentos más versátiles que existen. Se pueden cocinar de muchas formas distintas y combinan bien con una amplia variedad de ingredientes. Sin embargo, pelar y cortar patatas puede ser una tarea engorrosa y que consume tiempo. Es por eso que los proveedores de patatas congeladas se han convertido en una opción popular para quienes desean ahorrar tiempo en la cocina.

 

Estos proveedores ofrecen patatas peladas, cortadas y congeladas para que los clientes las preparen en casa sin tener que hacer todo el trabajo pesado. Las patatas congeladas son una excelente opción para aquellos que buscan una forma fácil y rápida de cocinar. Además, no hay necesidad de preocuparse por la frescura de las patatas, ya que están congeladas poco después de ser cosechadas.

 

La comodidad de las patatas congeladas es solo uno de los beneficios que ofrecen los proveedores de patatas congeladas. También ofrecen una amplia variedad de productos, desde patatas fritas crujientes hasta papas al horno suaves y esponjosas. También se pueden encontrar patatas dulces, ñames y otras variedades de tubérculos congelados.

 

Para aquellos que buscan opciones de comida saludable, los proveedores de patatas congeladas también ofrecen opciones bajas en grasas y calorías. Estas opciones pueden incluir patatas horneadas o al vapor, que son excelentes para aquellos que buscan reducir su consumo de grasas y calorías.

 

Otro beneficio de los proveedores de patatas congeladas es que son muy convenientes para aquellos que tienen una vida ocupada. Con las patatas congeladas, no es necesario ir al supermercado todos los días para comprar patatas frescas. En lugar de eso, se pueden comprar grandes cantidades de patatas congeladas y almacenarlas en el congelador para tenerlas siempre disponibles cuando se necesiten.

 

Además, con la pandemia del COVID-19, muchas personas están cocinando más en casa y los proveedores de patatas congeladas son una excelente opción para aquellos que quieren cocinar comidas fáciles y rápidas sin tener que salir de casa a comprar ingredientes frescos.

En resumen, los proveedores de patatas congeladas ofrecen una amplia variedad de opciones convenientes, saludables y deliciosas para aquellos que buscan ahorrar tiempo y esfuerzo en la cocina. Ya sea que estés buscando patatas fritas crujientes o patatas horneadas suaves y esponjosas, hay un Proveedor de patatas congeladas que ofrece lo que necesitas. Así que, ¿por qué no probar algunas patatas congeladas la próxima vez que quieras cocinar una comida rápida y fácil en casa?

Carne ultracongelada: una y mil ventajas de este método de preservación

7 de cada 10 consumidores españoles reconoce que la carne ultracongelada es más cómoda y ahorrativa que la fresca. La mala prensa de este método de conservación es cosa del pasado, pues hoy se comercializa con calidad gourmet en los mejores establecimientos hosteleros del mundo. Tanto es así que la demanda de Proveedor de cordero congelado, además de pollo, ternera y otras carnes, se encuentra en máximos históricos.

 

Por ultracongelación entendemos un método para preservar las carnes, pescados y verduras en óptimas condiciones a temperaturas mínimas, de alrededor de -40 grados centígrados. Con ello, se logran dos objetivos: mantener intactas las propiedades y cualidades organolépticas de los alimentos y posponer el momento de cocinarlos, con las ventajas que ello conlleva.

 

Ultracongelar la carne presenta infinidad de beneficios, siendo la seguridad uno de los más notables. En concreto, carnes como el pollo y la ternera se estropean con rapidez; salvo que vayan a cocinarse en 24 ó 48 horas después de su preparación, el tiempo en la nevera supondrá una pérdida de su sabor y valores alimenticios. En cambio, la ultracongelación permite ampliar este lapso, especialmente si las carnes fueron envasadas al vacío, por la ralentización de la proliferación de microorganismos que ofrece este método de preservación.

 

Por otra parte, las carnes ultracongeladas son realmente prácticas y fáciles de manipular y de organizar. En muchos sentidos, suponen un ahorro de tiempo considerable, exigiendo únicamente un congelador adecuado —capaz de llevar la temperatura de los alimentos hasta los 40 grados centígrados—, pues el consumidor tiene un mayor control sobre el momento en que cocinará los alimentos, en lugar de verse acuciado por la fecha de caducidad de los mismos.

 

Además, elegir carnes y otros productos ultracongelados contribuye en cierto modo a la sostenibilidad ambiental. Diversos estudios vinculan su consumo con un menor desperdicio de los alimentos y un mayor aprovechamiento de los recursos naturales.

QUISIERA UNA FIESTA DE VERANO

Mientras hablaba el otro día con uno de mis amigos me contaba que casi todos los días va a comer a un bar que hay muy cerca de su trabajo porque allí casi siempre tienen pescado en el menú. Y es que a mi amigo le encanta comer pescado y en casa no se lo preparan muy a menudo. Mi amigo siempre cuenta que este bar debe de tener un Proveedor de pescados de cuero congelados para hosteleria, ya que siempre puede escoger entre unos cuantos pescados diferentes. A mi personalmente no es que me encante el pescado pero a él sí que le gusta mucho y muchas veces cuando vamos de cena, mientras casi todos pedimos carne él casi siempre pide pescado aunque me parezca extraño.

Hace ya bastante tiempo que no vamos todos a cenar por ahí, la última vez que fuimos a cenar fue en un restaurante asturiano que hay muy cerca del bar de los padres de uno de mis amigos que es donde solemos ir a tomar las copas los fines de semana. En ese restaurante siempre hemos comido estupendamente, comamos lo que comamos. Unas veces hemos probado los chuletones que son una cosa espectacular, pero también hemos probado el clásico cachopo y el queso frito. Que para mi el queso frito fue un descubrimiento grandioso porque nunca lo había probado y me encantó aunque no sea demasiado fan de los quesos.

Espero que dentro de poco hagamos como mínimo un churrasco para poder reunirnos ya que desde que empezó el verano solamente nos hemos podido reunir una sola vez, y es que en verano cada uno tiene sus responsabilidades sobre todo para los que tienen hijos que hoy en día están de vacaciones. Sin ir más lejos el otro día me encontré con la mujer de uno de mis amigos con una de sus hijas, y también me dijeron a ver cuando hacíamos algo todos juntos como hicimos el año pasado en la casa de uno de nuestros amigos y que nos lo pasamos todos desde niños a adultos estupendamente.

Carne Avícola: 3 razones por las que congelarla es beneficiosa

La demanda de distribuidor de aves congeladas para hosteleria se ha incrementado exponencialmente en la última década. Sólo en España se producen más de 1,7 millones de toneladas de carne aviar al año, con un consumo per cápita que asciende a 14 kg, según la Asociación Interprofesional Española de Carne Avícola. ¿Tendría el mismo éxito sin los beneficios de la congelación? La respuesta es evidente.

 

Porque la congelación de carne aviar es una práctica necesaria y ventajosa en el sector de la hostelería. Diversas razones así lo explican. En primer lugar, este proceso ayuda a preservar estos alimentos frescos durante el transporte desde su origen hasta el establecimiento hostelero. Entera y cruda, este producto cárnico resiste hasta 12 meses sin sufrir un deterioro de su calidad y valor nutricional.

 

Por este motivo, las utilidades de la carne de ave congelada van más allá del transporte. Los restaurantes y hoteles congelan una parte de estos alimentos con el objetivo de descongelarlos a medida que los necesitan, sin temor a que pierdan frescura ni sabor.

 

Del punto anterior se deduce que congelar la carne de ave permite combatir eficazmente el desperdicio de comida. Este proceso incrementa la ‘vida útil’ de este y otros productos cárnicos, lo que fortalece la economía de establecimientos hosteleros, al maximizar el aprovechamiento de viandas, y redunda positivamente en la imagen corporativa, pues el desperdicio alimentario puede afear la reputación empresarial.

 

Además, la calidad y aporte nutricional de las carnes de ave pueden conservarse, siempre y cuando hayan sido congeladas de manera adecuada, es decir, con la máxima rapidez posible para prevenir la formación de cristales de hielo. Por esta razón, los gourmets más exigentes no pueden distinguir una alita de pollo recién descongelada de otra no sometida a congelación. Así pues, no sorprende que las aves congeladas sean tan demandadas en el sector hostelero.

Un nuevo trabajo 

Siempre me ha gustado conducir y cuando tuve la oportunidad de tener un trabajo que me permitiese estar al volante no lo dudé. Pero la vida del transportista puede ser dura y no todo el mundo está capacitado para ello, sobre todo cuando tienes que recorrer grandes distancias. En mis primeros años lo veía como un reto: cuanto más lejos mejor y recorrí miles de kilómetros por carreteras de muchos países de Europa.

Pero pasado un tiempo empecé a darme cuenta que no podía seguir a ese ritmo mucho tiempo más y que debía intentar buscar algo que me supusiera menos movimiento y dormir en casa cada noche, si pudiera ser. Fue así como acepté el trabajo como distribuidor de alimentos congelados para una empresa especializada. Era una empresa que conocía de algunos compañeros y me habían hablado muy bien de ella, así que no tuve dudas.

Además, en algunos de mis trabajos anteriores ya había trabajado transportando alimentos frescos o congelados así que no era para mí mucha novedad ser distribuidor de brocoli congelado. Por supuesto, una de las cosas buenas de este trabajo era que me iba a permitir conseguir lo que buscaba: trabajar con un circuito de reparto más cercano que me permitiese dormir en casa cada día y no estar tanto tiempo fuera. Pero, además, me gustaba por el contacto con los clientes.

Uno de los aspectos más positivos de este tipo de trabajo es el contacto con la gente. Cuando tienes una ruta de reparto por la ciudad, acabas haciendo amistad con la mayoría de los clientes creándose una afinidad muy agradable. Por supuesto, hay que cumplir unos plazos estrictos de entrega y ser muy cuidadoso ya que se trata de alimentos: cuando eres distribuidor de brócoli congelado entre otros alimentos, la prioridad es la rapidez y eficiencia del servicio. 

En este sentido, los clientes son también muy exigentes ya que el éxito de sus negocios depende ante todo de la calidad de las materias primas, pero por eso también se crea una relación muy estrecha con ellos, algo que a mí me resulta muy satisfactorio.

Picoteo muy europeo para tus cenas Erasmus

Ir de Erasmus es una de las experiencias más enriquecedoras para un estudiante. No se trata tanto de lo que aprenda desde el punto de vista académico, sino de todo lo que aporta el vivir otra cultura y sumergirse totalmente en el día a día de otro país.

Contrariamente a lo que se dice, no todo es fiesta cuando uno se va a otro país a estudiar un curso académico. Y, aunque la diversión siempre es un punto importante, aprovechar todo lo que la experiencia ofrece es lo que la mayoría de los estudiantes hacen.

Son muchos los estudiantes españoles que se embarcan en la aventura del Erasmus cada año, pero también son numerosos los estudiantes de otros países europeos que vienen a disfrutar esa experiencia en nuestro país y que quieren conocer mejor cómo vivimos y nuestra cultura.

Convivir con ellos no solo les ayudará a llevarse la mejor impresión de España, también puede ayudarnos a conocer algo más sobre sus países. Y una buena forma de entrar en contacto y romper el hielo es con una cena de picoteo con los estudiantes Erasmus de tu facultad, en la que se ofrezcan productos de todos los países.

Hace unos años esto podía ser un auténtico compromiso para los estudiantes que tuvieran que conseguir productos de su país para el picoteo. Pero hoy ya no es un problema porque es fácil encontrar, por ejemplo, una Tienda online de quesos franceses y italianos o incluso productos típicos de otros países.

Unos quesos de diferentes nacionalidades, unas botellas de vino y el picoteo está asegurado. Y también una conversación agradable porque con comida de buena calidad siempre aparece una excelente conversación.

Para que el picoteo sea mucho más agradable, se pueden tener listos algunos juegos o se puede pedir a cada invitado que preparen alguna historia o una pequeña charla con las costumbres más llamativas de la zona en la que viven o con lo que más les ha chocado de nuestro país una vez que lo han conocido.

Esta puede ser una excelente forma de romper el hielo y de hacer que estos estudiantes se sientan muy a gusto entre nosotros, conociéndonos todos un poco más. Una enseñanza que no se imparte en la universidad pero que, gracias a ella, puede disfrutarse. Porque el Erasmus puede vivirse sin tener que salir de España.

El regalo de cumpleaños 

Cada año que pasa es un poco más difícil hacer el regalo de aniversario, supongo que nos pasa a muchos. Y es más difícil principalmente porque se van agotando las ideas si uno no quiere repetir: no vas a regalar todos los años unos zapatos. Hay que intentar innovar, que se note que sigues pensando en tu pareja y que intentas descubrir nuevos gustos o aficiones. Porque saber regalar es un talento especial: hay que conocer bien a una persona para detectar sus gustos. O, dicho de otra forma: cuando haces un regalo inadecuado es una forma de decir “casi no te conozco, cariño, después de tantos años…”.

Por eso yo trato de mirar muy bien qué regalo. Y cuando se me enciende la luz y veo una posibilidad de comprar una cosa diferente a todo lo anterior, me pongo feliz. Este año pensé en el café, en café con leche entera, uno de los pasatiempos más queridos de mi mujer: es una absoluta fanática del café. Pero en casa no tenemos cafetera automática. Algún año se me ocurrió comprar una pero no lo vi claro teniendo en cuenta la cantidad que hay en el mercado.

Pero lo que yo quiero no es una cafetera de cápsulas de esas que están tan de moda. Desde luego que son más baratas, pero yo busco algo más especial, una cafetera que le permita a mi mujer tener en casa los cafés como si los tomara en un local, como si estuviera en Italia, paraíso de los cafeteros. Bueno, quizás eso es demasiado, pero con la cafetera que seleccioné todo es posible. 

Por el precio debería hacer cafés maravillosos, eso espero. Además, es una cafetera capacitada para meter leche entera en un recipiente complementario de forma que te sale ya listo el café con leche y espuma. Por otro lado, tiene un montón de funciones que permite al usuario elegir otros tipos de café, como capuchino, cortado, expreso, etc. Espero acertar, casi seguro que sí: aunque con lo que cuesta, el próximo aniversario tendrán que ser zapatos de Zara.

LO QUE HEMOS DEJADO DE HACER

Desde que empezó todo esto de la pandemia he de reconocer que no he ido demasiado a los supermercados salvo para comprar Yogures de sabores Central Lechera que no puedo pasar ni un solo día sin ellos. Antes solía ir bastantes veces al mes al supermercado pero ya no es algo que me llame. Por norma general ya he dejado de hacer casi todo lo que antes de la pandemia y tampoco es que tenga ganas de hacerlas, más que nada porque para tener que hacer las cosas solo prefiero no hacerlas. Y casi todo es culpa del toque de queda, que a decir verdad me alegro de que no lo pasen a las ocho de la tarde. Yo solamente salgo de casa a partir de las cinco de la tarde así que no me compensaba que adelantasen la hora del toque de queda. Considero que el toque de queda a las 23h era más que correcto, porque a las 22h no creo que nadie quiera ir a su casa obligado. Para mi el toque de queda está siendo casi más duro que el confinamiento, porque no me deja hacer cosas que me gustaban, como ir a la playa por las noches a pasear hasta la hora que me diese la gana, que lo hacía bastante a menudo pero llevo sin poder ir a la playa de noche casi un año entero por culpa del coronavirus.

 

Otra cosa que echo mucho de menos es el no poder ir a nadar a la piscina como llevaba haciendo durante años. Pero hasta que me vacunen no me voy a acercar a nadie que esté haciendo ejercicio ya que los aerosoles llegan más lejos cuando estás haciendo ejercicio. Y tampoco puedo entender porque hay gimnasios que siguen abiertos, parece que a los usuarios no les importa el poder contagiarse aunque estén obligados a llevar mascarilla en todo momento.

 

Espero que todo esto termine lo antes posible para poder volver a nuestras rutinas y a las cosas que solíamos hacer antes y que ya no nos dejan hacer desde hace ya demasiado tiempo.

Productos que puedes encontrar en el mercado con y sin leche

Para alguien a quién se le acaba de diagnosticar una intolerancia a la lactosa, hacer la compra no vuelve a ser nunca lo mismo. Cada vez que se compra un alimento tendrá que comprobar si lleva o no leche. Con el paso del tiempo ya sabrá qué puede y qué no puede tomar, pero cada vez que no encuentre su marca habitual deberá de realizar de nuevo las comprobaciones.

Y es que son muchos los productos que podemos encontrar en el mercado en diferentes preparaciones, lo que los convierte en productos sin leche bajo unas marcas y productos con leche bajo otras. Veamos algunos casos bastante llamativos.

El primer ejemplo lo tenemos en el chocolate. Un intolerante a la lactosa sabe que una de las cosas que no debe de tomar es chocolate, ya que la mayoría de las veces contiene leche. El chocolate negro es un ejemplo de producto que puede ser con o sin leche según la marca. Mientras que algunos no tienen leche en absoluto, otros tienen una proporción por lo que ya no son aptos para quienes sufren intolerancias.

Lo mismo sucede con ciertos productos de bollería. Las magdalenas caseras suelen prepararse sin leche, ya que cualquier buen cocinero sabe que cuando se hacen sin ella están blandas más tiempo y son más sabrosas. Pero en muchas recetas de magdalenas envasadas encontramos leche e incluso nata para darles más sabor o cremosidad. Por eso, deberemos de comprobar las etiquetas antes de comprar magdalenas, por mucho que siempre que las hayamos preparado en casa sean aptas.

Un error común en los intolerantes es dejar de tomar dulces realizados con manteca, como mantecados, nevados o polvorones. Pero la manteca no es otra cosa que grasa, generalmente de cerdo. Pero incluso si es de vaca, no tiene ningún problema. No se debe de confundir con la mantequilla, que en algunos lugares se denomina manteca de leche, creando así esta confusión. De todos modos, algunos tienen ambos ingredientes en función de la receta, por lo que es necesario comprobarlo.

Para mayor tranquilidad, es importante saber que todos los alérgenos tienen que estar perfectamente indicados en negrita, por lo que solo hay que buscar las palabras en oscuro para saber si hay leche, lactosa o cualquier derivado que pueda causar problemas por no ser capaz el intestino de digerirlo.

Los helados en tu local atraen muchos clientes

Tras una comida o cena copiosa a la mayoría de nosotros nos apetece un postre que no sea excesivamente pesado, que sintamos que ayuda a hacer la digestión pero que a la vez nos de esa satisfacción que nos proporciona el tomar algo dulce. Y todo eso lo consiguen los helados.

Sean de vasito, en cucurucho o las típicas tartas heladas, este postre siempre va a estar demandado y es el favorito de los niños. Por eso, no puede faltar en ningún restaurante ya sea especializado en platos del día o para cenas y comidas de celebración.

Los helados para hosteleria aportan muchas ventajas al local, ya que muchos de los que escogen helado de postre no van a tomar otra cosa si no se les da esto, con lo que se estará perdiendo una venta y tendremos a un cliente que no se va a ir cien por cien satisfecho ya que mientras sus compañeros de mesa comen su postre, el tendrá que conformarse con una infusión o un café. Algo que puede ser frustrante.

En el caso de niños, para muchos padres es fundamental que haya helados en el restaurante para que ellos mismos puedan disfrutar de su postre o de su café tras la comida ya que así el pequeño estará entretenido con su helado. De otro modo, el pequeño querrá irse inmediatamente después de terminar de comer y más de una vez escucharás eso de, trae la cuenta que ya tomamos el café en otro sitio. Y será un sitio donde haya un helado para los peques, sin duda.

El helado es un postre económico, clásico, que gusta a casi todo el mundo y no hace falta siquiera tener una grandísima variedad de ellos para poder satisfacer a los clientes. Durante el invierno basta con los típicos vasitos de chocolate y vainilla o de fresa y nata y las tartas más típicas, como la estilo comtesa y la de whisky. Durante el verano, la oferta sí que debería de crecer, ya que es el momento en el que el helado tiene un poco más de protagonismo.

Busca un proveedor de helados para hostelería y no dejes a tus clientes sin un postre que encaja tanto en una comida formal como en un plato del día y que siempre va a ser solicitados porque es un clásico imperecedero.