Muchos dueños de perros acuden a Comprar suplementos perros para calmar los nervios en momentos en los que saben que sus animales van a tener un estrés adicional, por ejemplo cuando saben que habrá fiestas y que se tirarán petardos o que va a haber gente en casa durante unos días. En el mercado existen diferentes tratamientos para los perros que si bien no son como un calmante de veterinario, esto es, un medicamento, sí ayudan en casos moderados o leves de nerviosismo.
Existen diferentes formas de dar este tipo de medicamentos naturales o suplementos alimenticios a tus peludos. Algunos de estos calmantes se aplican en el aire, como son los que contienen feromonas. Es la forma más eficaz y también la menos violenta para el perro porque este no se va a enterar de nada, solo respirará en su habitación favorita, mejor si es donde duerme, y estará recibiendo esas feromonas que le transmitirán el mensaje de tranquilidad que necesita. Estas feromonas suelen ser eficaces, pero hay que comenzar a administrarlas varios días antes de que se produzca la situación que le causará nervios, por lo que no siempre es el modo más adecuado.
Las cápsulas son también una forma de administración que puede ser sencilla, ya que en su interior suelen tener el suplemento en formato polvo. Solo hay que mezclarlo con comida húmeda y el perro no se debería ni de enterar de que se le ha puesto algo a mayores. Ni el más experto detector de pastillas podría notar que hay algo en su alimento y lo comerá tan feliz. Algunos de estos productos también se pueden echar en el agua y no dejan sabor, por lo que también es sencillo que los animales lo tomen.
En el mercado encontramos incluso pienso o comida húmeda que cuentan con estos suplementos que ayudan a que el animal esté algo más tranquilo. Pueden ser eficaces pero no son prácticos si solo queremos darles esto de manera ocasional.
Nos quedarían las pastillas, que para muchos perros no suponen problema, especialmente si van en el interior de una salchicha que se comen casi sin masticar. Otros, son auténticos especialistas en escupir la pastilla y encontrarla esté donde esté. Si no te queda más remedio que darle este formato, puedes comprar cápsulas con sabor a carne en las que introducir la pastilla. El animal percibirá el producto como si fuera un premio y lo comerá.