El comercio electrónico me ha convencido

Soy de los que tarda en entrar por el aro si se trata de tecnología. No me fío de las novedades hasta que no están plenamente asentadas y solo cuando se demuestra que tienen una utilidad práctica, al menos para mí. Por ejemplo, todo el mundo se afana ahora en hablar de la inteligencia artificial: a mí solo vienen a la cabeza algunas películas… y mucho humo.

Pero la tecnología bien aplicada y respetando los tiempos es imprescindible, como podemos comprobar en el sector del comercio electrónico. En un principio, yo preferí esperar antes de lanzarme a comprar cosas por internet, pero desde hace un tiempo me declaro fan total del ecommerce. ¿Por qué? Pondré un ejemplo para ilustrarlo.

Quiero Comprar Chalecos Polo hombre. Puedo ir a un centro comercial o a un outlet, pero no tengo demasiado tiempo. Para poder acercarme a una tienda tengo que reservar una tarde o una mañana, pero gracias a internet, desde el móvil puedo mirar en los tiempos muertos en casa (o en el trabajo) hasta dar con lo que busco. Y esa mañana o tarde que tenía que invertir en comprar ropa la puedo dedicar a otra cosa.

En una época en la que vamos todos con la lengua fuera (tal vez nos exijamos demasiado, pero eso es otra historia) poder comprar casi todo por internet es un balón de oxígeno para muchos de nosotros. Pero la prueba de que todavía queda bastante por hacer incluso con el comercio electrónico es que todavía existe un tipo de compra que no se hace cómodamente por internet, al contrario que lo de Comprar Chalecos Polo hombre.

Me refiero a las compras de alimentos y productos básicos en el supermercado. ¿Cuánto tiempo gastamos semanalmente en ello? Yo, por lo menos, también tengo que reservar una tarde o una mañana para hacer la compra semanal. Y a mí no me divierte nada ir al súper, la verdad. Aunque hay empresas que intentan llenar este nicho, todavía no se ha dado con la tecla. Cuando exista una app práctica y fiable para comprar por internet, no duden que yo seré el primero en usarla.

¿Qué debo de tener en cuenta al escoger mis cortinas?

Si vas a comprar cortinas para tu hogar, hay varias cosas que tienes que tener en cuenta para escoger las perfectas para cada habitación. Te ayudamos a hacerlo con una pequeña guía que te indicará paso a paso qué cortinas son las más adecuadas:

-Cortinas de dormitorio. Aquí tienes que tener en cuenta dos aspectos básicos. El primero es la luz. Si tu habitación no tiene persianas que aíslen totalmente de la luz es bueno que compres cortinas gruesas y bastante opacas que te permitan que el dormitorio esté oscuro hasta que tú quieras abrirlas. Así, podrás dormir un poco mejor por las mañanas cuando no quieras madrugar o si por cualquier causa necesitas descansar durante el día.

Puedes combinar las cortinas gruesas con unas más finas para poder separar las opacas durante el día y mantener una cierta privacidad con un visillo fino por debajo. También puedes usar un estor para controlar la entrada de luz cuando descorras las cortinas.

-Cortinas para la sala. Normalmente, en la sala no es tan importante que las cortinas sean opacas porque no vas a necesitar una oscuridad total. Aquí seguramente le vas a dar más importancia al diseño. Si tus sofás y alfombras son en tono liso puedes apostar por unas cortinas con un estampado alegre que le de algo de luz y originalidad a la habitación. Si por el contrario tus tapicerías y alfombras tienen mucho color, apuesta por los colores lisos a juego para evitar que la habitación se vea recargada en exceso.

Lo mejor para la sala es una cortina simple que evitará que se ocupe demasiado espacio, sobre todo si no es una habitación muy grande. Una tela que deje pasar luz pero que proteja del sol es perfecta para este tipo de habitaciones. Puede combinarse la cortina con una persiana veneciana que regule la entrada del sol en los momentos de más intensidad o con un estor tal y como hemos propuesto para el dormitorio.

-Cortinas para la cocina. En la cocina apostamos claramente por los estores de tela lavable que se limpian con un paño húmedo y que evitan mucho trabajo y muchas lavadoras. Se verán siempre impecables y no será necesario quitarlos para limpiarlos perfectamente. Pero si eres de las personas tradicionales que quieren una cortina con motivos típicos, apuesta por telas muy fuertes que soporten muy bien el sol y los lavados continuados.