Picoteo muy europeo para tus cenas Erasmus

Ir de Erasmus es una de las experiencias más enriquecedoras para un estudiante. No se trata tanto de lo que aprenda desde el punto de vista académico, sino de todo lo que aporta el vivir otra cultura y sumergirse totalmente en el día a día de otro país.

Contrariamente a lo que se dice, no todo es fiesta cuando uno se va a otro país a estudiar un curso académico. Y, aunque la diversión siempre es un punto importante, aprovechar todo lo que la experiencia ofrece es lo que la mayoría de los estudiantes hacen.

Son muchos los estudiantes españoles que se embarcan en la aventura del Erasmus cada año, pero también son numerosos los estudiantes de otros países europeos que vienen a disfrutar esa experiencia en nuestro país y que quieren conocer mejor cómo vivimos y nuestra cultura.

Convivir con ellos no solo les ayudará a llevarse la mejor impresión de España, también puede ayudarnos a conocer algo más sobre sus países. Y una buena forma de entrar en contacto y romper el hielo es con una cena de picoteo con los estudiantes Erasmus de tu facultad, en la que se ofrezcan productos de todos los países.

Hace unos años esto podía ser un auténtico compromiso para los estudiantes que tuvieran que conseguir productos de su país para el picoteo. Pero hoy ya no es un problema porque es fácil encontrar, por ejemplo, una Tienda online de quesos franceses y italianos o incluso productos típicos de otros países.

Unos quesos de diferentes nacionalidades, unas botellas de vino y el picoteo está asegurado. Y también una conversación agradable porque con comida de buena calidad siempre aparece una excelente conversación.

Para que el picoteo sea mucho más agradable, se pueden tener listos algunos juegos o se puede pedir a cada invitado que preparen alguna historia o una pequeña charla con las costumbres más llamativas de la zona en la que viven o con lo que más les ha chocado de nuestro país una vez que lo han conocido.

Esta puede ser una excelente forma de romper el hielo y de hacer que estos estudiantes se sientan muy a gusto entre nosotros, conociéndonos todos un poco más. Una enseñanza que no se imparte en la universidad pero que, gracias a ella, puede disfrutarse. Porque el Erasmus puede vivirse sin tener que salir de España.